Tras doce años de vivir en las calles, Henry Arguello Rojas salió de los Tribunales de Justicia de San José con la motivación del comienzo de una mejor vida.

Arguello Rojas recibió este miércoles 5 de agosto el reconocimiento por parte del Programa de Tratamiento en Drogas bajo Supervisión Judicial (PTDJ) al dar un cambio en su vida, como parte de su compromiso de reparar el daño causado por un delito cometido.

“Por necesidad de comer y de comprar droga ingresé el 5 de diciembre del 2013 a un restaurante de comidas rápidas donde robé la llave de un fregadero que podía vender en ¢25.000. Al llegar detenido a los Tribunales de Justicia y durante el proceso judicial acepté mis errores y mi enfermedad, pero también recibí una mano para cambiar mi camino” expresó Henry Arguello.

Para reparar el daño causado, Henry ingresó al Programa de Tratamiento en Drogas de Justicia Restaurativa permitiendo que un equipo interdisciplinario atendiera su adición… Dos años después es una persona rehabilitada.

“Hoy se gradúan personas valientes, que decidieron tomar el control de sus vidas y que sin duda alguna generaron un proyecto de vida” indicó la Magistrada Doris Arias Madrigal, Directora del Programa Justicia Restaurativa.

El Programa de Tratamiento en Drogas bajo Supervisión Judicial pretende brindar una atención especializada e integral a las personas imputadas que presentan una adicción a sustancias psicoactivas y que como consecuencia de dicha problemática inciden en la comisión de delitos.

El equipo interdisciplinario que interviene es el mismo de la Oficina de Justicia Restaurativa constituida por una jueza o juez, representantes del Ministerio Público, Defensa Pública, un profesional en Trabajo Social y Psicología. En relación al tratamiento se involucran otras entidades como el Instituto sobre Alcoholismo y Farmacodependecia Costa Rica (IAFA).

Para la Magistrada Doris Arias, el programa fortalece los esfuerzos hacia una Justicia más humana e integradora. “Hace realidad el ideal democrático que nos inspira desde nuestra Constitución Política, según lo cual garantizaremos igualdad, inclusión, que todas las voces sean escuchadas, que se haga justicia, y que las personas asuman el control de sus vidas y pueden participar en la toma de decisiones que les afectan”.

Esta es la segunda ocasión en que se finaliza el Programa de Tratamiento en Drogas.

“Este es el rostro humano de la justicia. Por dificultades en la vida, estas personas tomaron una mala decisión, pero hicieron un cambio provechoso para ellos y para la sociedad. Son ejemplo de los cambios que puede dar una persona y demuestra que la represión no es la respuesta a los problemas, pueden haber otras”, indicó Edgar Castrillo Brenes, juez coordinador del Juzgado Penal de San José.

En esta graduación también finalizaron el programa otras dos personas de apellido Garro y Fonseca.

Estuvieron presentes representantes del Programa Justicia Restaurativa, Ministerio Público, Defensa Pública, Departamento de Trabajo Social y Psicología, el Instituto Costarricense de Drogas (ICD), el Instituto de Alcoholismo y Farmacodepencia, así como familiares de las personas que se graduaron.

Henry tiene actualmente un trabajo en el Hogar Salvando a Alcohólicos de Escazú, lleva una vida saludable y un mensaje de cambio a quien lo necesita sirviendo su testimonio de doce años en medio de las drogas y la calle, reflejando que con valentía y disposición se puede ser mejor persona.